!

Envianos tus propuestas, ideas, poesías, dibujos, fotos, lo-que-sea a movimiento.dial@gmail.com incluyendo un link o correo electrónico de contacto para los visitantes. No censuramos ni modificamos nada. Liberamos.



23.5.10

21.5.10

Libertad. Y Sálvese quien quiera.

Sustancia. Se asemeja a la arena en el espacio donde se acuesta y vive cerca de la espuma del mar. Te confunde como más pájaros intentando acercarles, no por cariño reflejado si no porque sobre ella corren carreras miles de gusanos que saben que tienen un destino frito.
Sustancia. Como aquellas que hacen a las nubes. La magia que confunde la situación entre ellas y las cadenas del tiempo; tiempo del clima, pues el tiempo reloj es una historia aparte que conlleva muchas políticas que hoy no quiero decir.
A ver si me enfermo menos... (ironía)
Sustancia. Creo que el verdadero significado es algo abstracto, lejos de las palabras, de las cárceles lingüísticas que interpretan las cosas como a equis personas se les cantó alguna vez. Y mal por ellos, pues se han quedado corto en muchos significados y en muchas situaciones... Y por eso inventaron la poesía, la metáfora.
Porque saben que su error lo descubre el hombre en la medida que conoce la felicidad.
Porque una de esas palabras casi sin significado es ella.. o él.
Y él y yo intentamos retorcernos dentro de las novecientas páginas del diccionario, pero nada nos convence, y si es faltante, no es totalmente descriptivo, y si a veces se acerca, nunca termina de parecerse a nuestra realidad.

Pensé en las sustancias como en las pinturas abstractas, como en las Nubes. Porque uno se acerca a ellas y sabe que son en sí, pero nunca entienden el cómo ( y no hablo del cómo científico). Y ni hablemos del porqué ni del qué.
Están, siempre están. Y la particularidad de ellas es que sólo el creador sabe qué pasa en ellas, qué sucede dentro de ellas... Y luego vienen los críticos de arte, la gente de la sofisticada elite, y empiezan a interpretar el rastro del pincel y el material sobre el lienzo como si ellos hubiesen sido parte de sus neuronas, de los músculos de sus manos cuando el artista agarraba el pincel y se destinaba a pintar...
Por que la pintura es un lenguaje, no es un motivo de elite. Y las nubes son el lenguaje de la naturaleza.
Le doy gracias a los niños que aún siguen viendo imágenes en ellas. Hoy vi un perro, y era muy lindo, aunque atrás de él estaba...

Sustancia.

Ganas, libertad, anti cámaras de gas.
Una lista de cuestiones diferenciales abstractas listas para ser llevada a cabo en alta mar.
El mundo presentado por las naranjas que hoy por hoy parecen ser limones (gracias). Y las pinturas vacías de sentimientos, que se venden más que papel higiénico.

No pretendo establecer temperaturas en algunos ni que voten mi cabeza para que luego ruede en Plaza de Mayo. Ni que lean esto para que el día de mañana agenden mi teléfono en algún papel y el uniforme deje mis restos debajo del paredón.
Sólo digo que se busque alguna forma de establecer un diccionario real que diga qué es para cada uno la vida. La sustancia. Atentos y sin remordimientos...
Donde la poesía pueda ser real y la metáfora pueda ser entendida por todos y no sólo por algunos jóvenes de mentes alteradas.
La posibilidad de entender al amor como una enfermedad y no solo el momento de regalarse chicles masticados, de regalarse tarjetas de un precio voluntario recolectadas en los trenes donde nenes que deberían de estar en el colegio, están ahí arriba juntando guita mientras sus padres se revuelcan y hacen más pendejos porque no entienden la situación que evita el ponerse un forro.
Perdés el tiempo pibe, en esos segundos te clavas una paja.
Ahora anda, trae guita. No comida. Guita

oh si, el amor.. el amor.

Ahora que nos entendemos, puedo decirle a mi amor que lo amo. Que debajo de su cama tiene el machete donde puede cortarme la cabeza. Todavía seguimos buscando el qué, luego del te amo.
Aquellos genios se esforzaron en saber qué viene primero y qué después en las palabras que cualifican el aprecio y la necesidad que tiene un humano por otro.
Pero no lograron nunca interpretar qué viene después,
Igual los perdono. Capaz que nunca amaron así.


¡Que me corten la cabeza!

http://www.labialrojowhore.blogspot.com/

16.5.10

Barbara de Lellis




Acrílico

115 x 75 cm.

2010

Elizabeth Leonardi

Rupertetas rema tetas

Juan Martín del Pedrazo y Franz Kafka Rodriguez Saa presentan:


Rémulo, Rome y Ruperta. Primer Acto:

Rome: Ya son las cinco, hora de chuparle las tetas a la vieja que nos alimenta.
Rémulo: ¿Se acabó el guiso del año ’45?
Rome: Lamentablemente sí.
Rémulo: Bueno, no quedará otra cosa que lamerle los pechos flácidos a nuestra supuesta madre adoptiva.
Rome: ¿No sería mejor ir a trabajar?
Rémulo: ¿Cuántos años tenemos?
Rome: Como dieciocho.
Rémulo: A esta edad nuestros antepasados estaban fundando Roma.
Rome: Pero nosotros no somos nuestros antepasados.
Rémulo: ¿Y qué somos?
Rome: Dos chupatetas.
Rémulo: Y si no queda otra…

Aparece Ruperta (más parecida a un lobo arruinado que a una mujer) con sus pechos caídos, chorreando leche rancia de sus senos.

Ruperta: ¡Niños, vengan a mamarme si no quieren morir de hambre!
Rome (Hipócritamente): Allí vamos, madre. No hay nada más delicioso que lamer esas honorables tetas.
Rémulo: Coincido plenamente.
Ruperta: ¡Que niños tan dulces he criado! ¡Ahora a chupar!

Rémulo y Rome repliegan sus cabezas por debajo de las axilas de Ruperta, para así poder alimentarse del seno mamario.

Ruperta (Gritando extasiadamente): ¡Ay, Ay! Mmm… Rico… Rico…
Rémulo (Saca su boca de uno de los senos): Madre, esta leche ya parece ricota.
Ruperta: ¡Callate y seguí chupando, pendejo!
Rome (Saca su boca de la teta y comienza a escupir): Por favor, madre, ya no podemos seguir lamiéndole las tetas. Por favor, déjenos vivir libres como blancas palomas.
Ruperta: ¡Idiotas! ¿No ven lo que les deparará el destino? ¡El mundo es muy duro para niños como ustedes dos! ¡Los van a querer timar, estafar, quizá hasta asesinar! ¡Los protejo del mal, de la degradación, de la injuria de ser esclavo del mundo al tenerlos aquí! ¿Cuándo lo van a entender?
Rome: Tal vez todavía no lo entendimos.
Ruperta: Mejor seguí chupando, si no querés que te golpee.
Rome: ¿Qué es la miseria, madre?
Ruperta: Todo, menos chupar tetas.
Rome: ¡Que bueno! (Y vuelve su boca hacia los senos de la vieja)
Rémulo (Libera su boca): ¿Qué es la rebelión?
Ruperta: Dejar de chupar tetas.
Rémulo: ¿Todos les chupan los senos a sus madres?
Ruperta: ¡Por supuesto!
Rémulo: ¿Hasta qué edad?
Ruperta: ¡Pues toda la vida!
Rome (Saca su boca de los senos de Ruperta): Hay veces que intento pensar…
Ruperta: Pero siempre fallás.
Rome: Pero lo intento…
Ruperta: Pero fallás. Ustedes son como dos abortos.
Rome y Rémulo: ¿Nosotros?
Ruperta: Sí, ustedes apenas sobreviven gracias a esta ricota. Es difícil pero es así. ¿Acaso no es esto o el guiso del año 45´?
Rome: Claro, Pero…
Ruperta: ¡Nada! (Acariciándose los senos) ¡Se acabó el guiso, sólo quedan las tetas!
Rémulo (Sacando su boca de los senos y escupiendo): Hemos visto otras tetas en nuestras vidas.
Ruperta: Nadie come imágenes, querido incrédulo.
Rome: ¿Pero no podríamos tener otras tetas extras, aunque sean recreativas?
Ruperta. ¡Ay! ¡Qué desastre! No saben lo que dicen, siempre pensé que por más idiotas que fuesen, no serían ilusos.
Rémulo (Ya saciado de comer): ¿Qué es una ilusión?
Ruperta: Una ilusión es vivir sin tetas.
Rome: Imposible.
Ruperta: Imposible no. Yo no chupo mis propias tetas. Ustedes que sólo conocen éstas tetas, las tienen ya como parientes. No sean ingenuos.
Rémulo: ¿Qué es ser ingenuo?
Ruperta: Ingenuo es aquel que piensa que todos merecen tetas sólo por el hecho de existir.
Rome: ¡Revelador!
Rémulo: Eso se lo dedicamos a Bernard Shaw que nos mira por TV.
Ruperta: ¡Qué degenerado! Ahora vos, ¿De dónde conocés a ese hombre?
Rémulo: De los libros. De esos que están en el mueble aquel donde hay muchos.
Ruperta: Yo que pensé que sólo vivían para la cyberpaja.
Rome: Casi.
Ruperta: ¡Dios santo! ¡Ustedes son pobres, pobres idiotas!
Rome: Madre, él (Señalando a Rémulo) es un idiota particularmente inteligente.
Ruperta: ¡Qué desgracia! Son idiotas educados. ¿Se dan cuenta?
Rémulo: No, la verdad… ¿Qué puede llegar a pasarnos?
Ruperta: Cosas realmente terribles.
Rome: ¿Cómo qué?
Ruperta: La realidad es formidable, los pueden ahorcar, destruir, masacrar, antes que todo extorsionar.
Rémulo: Creo que nos extralimitamos. Las tetas éstas son viejas, si hubiese tetas nuevas… Rome: No existe ningún justiciero.
Ruperta: Podrían tratar de vivir por sus medios.
Rome: ¡Jamás! Mejor vivir de rentas.
Rémulo: Ahora ¿De qué vivimos?
Ruperta: Una pensión que me alimenta a mí… Y ustedes de mis tetas definitivamente.
Rome: Enorme error. Podemos vivir mejor si alquilamos un cuarto. Yo dormiré en el Living.
Ruperta: Están pensando, hijos, son dos forros que piensan. Pensar que todo esto es porque recién hoy se cansan de las tetas arrugadas. Aprendan la lección.
Rémulo: ¿La lección?
Ruperta: Todo lo que ustedes lleguen a pensar será en búsqueda de un confort o un placer.
Rome: Cada día es más difícil.
Ruperta: La realidad, hijos, es eso. Difícil es pensar que hay que vivir. Las tetas son sólo la punta del iceberg.
Rémulo: ¡Me cago en el iceberg!
Rome: Madre, esta perversión que hacemos es sórdida pese a que finjamos no querer hacerla.
Ruperta: No estás siendo del todo infeliz.
Rémulo: Está siendo muy infeliz, y yo también.
Ruperta: ¡Me toman el pelo!
Rome: Mucho más que eso. Esto es casi una tragedia, pero por suerte carece de sentido.
Rémulo: Nadie nos vio chupando éstas tetas, si no lo decimos nadie lo creería.
Ruperta: ¿Hace cuanto que la gente sabe lo de las tetas?
Rome: Desde los doce.
Ruperta: ¡Asquerosos!
Rémulo: ¡Perversa! Pensabas que tus hijos eran felices y sólo querías tus tetas chupadas.

A Ruperta le cae una lágrima mucho más dulce que la ricota.

Rome: Esto es poesía, madre.
Ruperta: ¿Poesía?
Rome: Sí, poesía. Una poesía fenomenal. Su lágrima sabe mejor que años de tetas envejecidas.

Ruperta se tapa las tetas, horrorizada.

Rome: Esto será una leyenda postmoderna.
Rémulo: Muy cierto, el esnobismo aquí es grande, madre. Pensar que le chupamos las tetas porque sí. En el fondo es una acción moral muy oscura. Pero los hermanos no tenemos moral.
Ruperta: ¿Entonces esto qué es?
Rome: Una familia de manzanas podridas.
Ruperta: El asco es nuestro aliciente.
Rémulo: La humillación también.
Rome: ¡Qué serios que estamos!
Ruperta: Eso pasa porque nos hablamos poco.
Rémulo: Claro que sí.
Rome: Paremos esto, metamos a otra mujer más ¿No les parece? Usted, madre, puede buscar a un hombre como el portero para que le chupe las tetas.
Ruperta: Ustedes dicen que el portero ¿Me chuparía las tetas?
Rome: ¡Claro que sí! Está cronológicamente más cerca de usted y se ve que necesita chupar muchas tetas.
Ruperta: Puede ser una salida de nuestra acostumbrada perversión.
Rémulo: Esto no es una perversión sino relativismo cultural.
Rome: Plan interesante, ¿Arruinamos otras vidas?
Ruperta: El pasado siempre condena a la humanidad.
Rome: Hablemos de V.
Rémulo: ¿V?
Rome: Sí, V, la vecina, bah, la novia del vecino que tiene problemas con él.
Rémulo: ¡Qué suerte!
Rome: Madre, hermano, esas son tetas nuevas, relativamente.
Rémulo: Cierto.
Ruperta. ¿Saben? Hay veces que hay que ser generosa y dejar que los perversos hijos se entreguen a todas las tetas que puedan. Es la verdad, la verdad más sublime y escandalosa.

Telón

14.5.10

Sillón

96- Sillón.

Culo pesado. Ausente de grasas.

Esencia de una nueva generación.

Sillón.

¿Tiene sentido vivir pegado a un televisor?

No lo sé.

No podría decirlo.

Mi tema es decir.

Mierda, cosas allí fuera me dicen mejor.

Sobre esa cosa que es el mundo.

Sobre su interesante olor.

Pero no dicen mucho más.

Los ojos de vidrio.

Una imagen de una amiga que uno quiere que sea puta.

La de una tacho de basura que se desea que sea un dios.

Sí un mundo alocado y desarticulado.

Sin noticias, porque nada pasa.

Mientras más nuevo, más simulado.

¿Me preguntó?

Si me lo preguntó. Una especie de trola imaginaria.

Ya no pienso más en él.

Ya te pagaba el alquiler.

No tenía una renta por peder.

Siempre es lo mismo el alquiler.

Querer imbecil querer.

Mirar culos para hacer vidrieras.

Tal cual si los pantalones no existieran

Y no se tuvieran que vender.

Si al fin, sillón, tu atando en nuestras casas.

Camadas y camadas sólo renuevas.

Asco para el mundo que vomita.

Por delivery.

Tazas,

Pasas

Y un poco de colesterol.

Yo no creo en el sol.

Yo vivo en mi terraza,

El smog cubre el horizonte.

Todo esta recalentado,

Tal cual los testículos estáticos cuando nos quedamos pensando.

Si en tal o cual lugar, esta pasando algo.

Bueno, el sillón es la negación de la historia.

La negación de la rueda.

Es el primer paso para tapar las arterias,

Muriendo seguramente

De sobrepeso y stress.

Genocidio Express.

todos te maltratan

Te maltrata el diariero,

Te maltrata el colectivero,

Te maltrata el vendedor,

Te maltrata el empresario,

Te maltrata el cliente,

Te maltrata tu empresa,

Te maltrata tu compañero,

Te maltrata el peluquero.

Te maltrata el maltratado,

El maltratador, el bien tratado.

Te maltrata el trato, el buen trato.

Te maltrata el maltrato.

Te escupen, te cagan, te insultan,

Te dicen “mierda” sin percato.

Te pegan en la nariz, te pegan los mocos.

Te maltrata la clase alta por ser de la baja,

La baja por ser de la media, la media por ser de la baja.

Los poderosos te extorsionan, los informantes te mienten,

Los periodistas te mienten, los políticos te mienten, las instituciones te mienten,

Las religiones te mienten, las palabras te mienten, las letras te mienten, los símbolos te mienten, los iconoclastas te mienten, los historiadores te mienten, la sinceridad también te miente.

El dinero se pierde, la salud se deteriora, el amor se corrompe, las causas justas se sobornan, la honestidad se finge.

Te maltrata la burguesía por ser proletario, por ser inteligente, por cualquier causa te maltrata.

Te maltrata el proletario por ser burgués, por ser débil, por ser burócrata.

La izquierda te escupe, la centro izquierda te caga,

La centro derecha te tortura, la derecha te asesina,

Los animales te muerden, los cigarrillos te queman,

Los patrones te bajan el sueldo, los coches te pisan,

La solidaridad te subestima, la comida te indigesta.

A los ricos les das lástima, a los pobres les das limosnas,

A los indigentes les das la espalda.

Te maltratan hasta tus amigos, hasta tus hijos,

Hasta tu esposa.

Te maltratan hasta tratando de hacerte sentir bien.

Te maltratan con cara de buenos.

Te maltratan hasta con indignación,

Con ímpetu, con razón, con gusto, con dinero, con hambre, con sueño, con fuego, con agua, con perfume.

Te maltratan hasta con angurria de tratar mal.

Te maltratan por amor, por odio, por envidia,

Por histeria, por estupidez, por celos, por sexópatas, por extravagancia.

Te llenan de excremento la cara aunque no quieras,

Te llenan de orina el pantalón, te comen la comida,

Te clavan cuchillos en el riñón, te venden comida en mal estado,

Te meten un palo en el recto hasta hacerte gritar, chillar, llorar.

Te hacen matar, sufrir, mentir, fingir, constipar.

Te insulta tu madre, tu hermano, tu padre, tu abuela, tu primo, y todo tu árbol genealógico.

Te ignoran los que no querés que te ignoren,

Se ríen de vos los que se creen inteligentes,

Se ríen de vos los que son idiotas,

Los que tienen alto nivel intelectual, los esnobs, los cultos, los iletrados,

Los analfabetos, los sátrapas, los moralistas, los bufones, los títeres.

Lloran por todos menos por vos los que creen que todo es trágico,

Todos son felices por todo menos por tu presencia,

Todos tienen carcajadas pero ninguna carcajada realmente es por tu gracia.

Todos te maldicen, te imprimen en el rostro una lágrima.

Todos te odian, todos te falsean la sonrisa, todos, absolutamente todos

Te maltratan… Hasta el filántropo.

12.5.10

10.5.10

Carencia

Si quererte es un pecado, amarte seria un sacrilegio,
Si quitarte el sueño estuviera prohibido, despojarte de tus sueños seria clamoroso,
Si alejarte de tu familia fuera vil, verte huir de mí seria aun más penoso,
Es por ello que ruego, día a día, no equivocarme contigo, porque sin ti mi vida nada vale

5.5.10

Reflexiones sobre el mito de la Ciudad Global

Ensayo brevísimo.

Pienso en el río como infraestructura y lindero geográfico y político. La isla urbana en el silencio atemporal de sus aguas. Las luces atraen, hablan de cierto dominio estratégico y cultural. Buenos Aires, sus vidrieras, mercados especializados, galerías, que reproducen la estética de la Ciudad Global. En este escenario, los actores, sus condiciones de vida, pertenencia, prácticas políticas, se legitiman por su visibilidad, inclusive se llegarían a equiparar, sostiene Saskia Sassen, por esa presencia, y en ese juego enfrentarían en un contexto autonómico a las formas económicas dominantes.

Vivir la réplica estratégica de Londres, Nueva York, Paris, Tokio, como un ritmo de baile y no una receta de progreso, que en el caso de las ciudades periféricas, requiere de un doble ejercicio, de más labor, sea al construir agujas, levantar un gran estadio, un centro de convenciones, un mega aeropuerto, para convencer, hacer verosímiles las sinergias globales, hay que simular sus estéticas, pero ¿hasta qué punto es eso posible?.

Me acerco a la noción de ciudad como obra de Henri Lefebvre, para explicar lo que quiero decir con mi trabajo plástico. En los más de seis años en los que residí en Buenos Aires, pude advertir de la expansión de ciertos sectores de la economía, el inmobiliario sobre todo, que en Puerto Madero significó crecer hacia las nubes. También y del mismo modo, el de las villas de Retiro, que también se multiplicaron para arriba. La reproducción siempre sucede a escalas determinadas. Pero hay algo más que una serie de coincidencias visuales, graciosas, emotivas, entre estos dos mundos, la ciudad global y la no ciudad, que se proyectaron paralelas.

En una ocasión, viajaba en catamarán por el río y pude reorganizar esa larga panorámica del puerto, que en un punto de la lejanía parecía eterna, sin desenlace. Esa imagen en la que se anulaban los conflictos, los cruces; y el conjunto: el mito de la ciudad global, aparecía como una conjetura de solución al problema estratégico, autonómico, de políticas públicas y privadas, que hace imposible que ese escenario sea concreto, al menos por ahora. La ilusión es, gracias a ciertos cortes, aceptable para cualquiera de nosotros.

Francisco José Suárez.

Exposición Individual. 3Plantas Artes Visuales. Larsen 2611 Capital Federal.

Inauguración Sábado 15 de Mayo de 2010. 20hs

http://artabula.wordpress.com/

Barbara de Lellis


Sin título
Dibujo con rotrin
25 cm x 35 cm
2007

www.barbaradelellis.com

mayo - número 1

Estamos muy contentos de poder haber vuelto papel lo que estuvimos haciendo estas semanas. Lo pueden conseguir mandando un mail a movimiento.dial@gmail.com, desde ya agradecemos a todos los que participaron en ésta publicación.

Hasta el viernes 7 de mayo es la convocatoria de los participantes en el número de junio, hasta entonces pueden confirmar. Los trabajos se van a recibir hasta el 15 de mayo, para poder organizar el diseño y la impresión con tiempo.

Quienes quieran incluir eventos en la sección de agenda y difusión, también pueden hacerlo hasta el 15.

Sigamos en sintonía.

4.5.10

Kalinimrod:

Revista Mente- Julio de 2028.

Este es uno de los vocablos más imprecisos de un libro que paradójicamente se llama: “El lenguaje de las lenguas no escritas de James Patson”. El libro hace una serie de reseñas sobre una tribu ancestral que habito en Mongolia hace más de diez mil años atrás. Como sabemos no dejaron ningún otro registro material que una gran cantidad de ánforas hundidas en medio de la estepa las cuales fueron encontradas en el año 2020, más precisamente el diez de enero de 2020, el día del cumpleaños de Patson. Desde ese momento, algunos han dado a llamar a esta civilización con el nombre escueto de MZ-1. Por la cantidad de ánforas encontradas se puede inducir que hubo una gran cantidad de ellas y que muchas se han perdido. Sólo se conservan según se supone, las de las figuras más importantes de la realeza, entre ellas la del líder espiritual de esta nación (cuestión a debatirse) pero que según la interpretación de Patson, el líder es el que goza de la suma de todos los símbolos fundamentales.

MZ-1, no produjo ciudades, lo que produjo fue una serie de refugios cerca de los montes Altai. Desde allí construyeron viviendas que les servían para pasar los inviernos. En los veranos según los restos hallados se utilizaban carpas y no consumían más que lo necesario. Sus herramientas rudimentarias pero de gran tamaño no eran hechas con metales, sino con piedras de filo asombrosamente eficaz y hueso. No obstante, la actividad que desarrollaban incluía una mezcla de producciones y la que más sobre sale según se indaga es la cría de pollos.

Esta digresión sólo tiene por fin contar con esta idea, las ánforas son el registro histórico más deslumbrante de esta civilización y su manera de pensar el espacio esta relacionada con la manera de enterrar estos recipientes. Según la creencia aún discutida pero desarrollada por Patson, es “el cielo” según estos hombres el que disolvía a los seres, pasado un tiempo. Es decir, es el cielo el que engullía a las personas. La negociación religiosa se basaba en poder disfrutar de la tierra el tiempo suficiente antes de que el cielo los absorbiera. Por esta causa se pudo analizar la manera en que los humanos según estas teorías de Patson enterraban las cosas en la tierra para que estas no se fueran al cielo.

No obstante y fundamentalmente hablaremos del término Kalimh-inj-Rohd. O en su versión occidental Kalinimrod. Pese a que no disponemos de una gramática, tenemos que creer la teoría auxiliar que desarrolla Patson. En ella, el Kalinimrod es una palabra y un objeto por lo que sólo en la observación de los objetos colgantes que se hallaban adheridos en el fondo de las ánforas se puede hallar la respuesta. Lo importante es que según Patson hay dos claves, el principio de Rod, el cual indica la pasión o manía por algo, y el principio de Kalimh que significa el desconcierto. Por ello debemos aducir nuestra incredulidad para una etnia tan primitiva. Pero según Patson esta es la clave para entender la génesis del lenguaje por lo menos en el caso particular de este pueblo. Según este arqueólogo, la palabra se va portando y como una especie de balbuceo se desarrolla sucesivamente. Patson cree que el Kalinh-inj-Rohd, es el gran estallido primigenio, es el primer estallido del lenguaje donde gran parte de las diez palabras básicas que fueron creadas, las cuales aún no ha explicitado cuales son.

La pregunta que todos nos hacemos con respecto a Patson es como se perdieron estas, y en que sentido estas aportaron significado a una civilización que no enterró a sus muertos sino a sus palabras.

Bueno en este momento es donde debemos acudir en la ayuda de Tortone. Este hombre, creó la significación del objeto-palabras. Es decir una suerte representación entre la palabra y la conservación de aquella. En lo que se llamó explosión de palabras o gran evento de surgimiento del habla. Si esto fuese así, la primera manera de conservar las palabras habría sido por medio de objetos. Los nombres propios fundamentalmente habrían estado inscritos en estos kalinimrods.

No obstante volviendo al punto de Patson y su teoría de un balbuceo originario parece poder ser útil cuando se busca indagar sobre una constelación semántica apropiada y suficientemente amplia. Esta fue una de las civilizaciones más extraordinarias según el autor porque no estaba atada al concepto de muerte por no carecer de la serie de nociones asociadas a ella. Las personas según esta cultura cambiaban hasta que desaparecían es decir que la muerte de las personas, y la presciencia de sus cuerpos inmóviles no era otra cosa que esta virtud del cambio. Era el cielo el que iba simplificando las cosas en forma sucesiva. Esta pasión por comprender los cambios es lo que impulsa la aparición de los primeros kalininmrods, estos son piedras circulares, grabadas con muchos motivos, donde se puede observar la voluntad a agotar todos los recursos básicos en grafismos. Una vez terminada esta tarea, el esfuerzo era enterrado. La más grande de estas ánforas se encontraba quince metros bajo tierra y su peso total era de ciento veinte kilos. En ella vemos un trabajo que pudo haber influido el esfuerzo de toda una comunidad como también la ausencia de alguna regla que ordenará principalmente estos signos. La ausencia de entierros funerarios podría indicar que las personas para esta cultura no eran otra cosa que nombres propios perdidos o cambiados y que una vez que estos desaparecían no quedaba otra que dejar en la indiferencia al cuerpo sin palabra. El objeto, o Kalinimrod personal era quitado del cuerpo y este era abandonado. En una de sus tesis más arriesgadas, según observaciones que se han hecho, los Kalinimrods eran también un sistema de parentesco donde el objeto origen era partido y entregado a los descendientes para que estos fuesen participes de la palabra.

De esta manera una de las hipótesis sobre el origen del lenguaje por lo menos en Mongolia se reduce a la tesis que la fabricación de objetos concretos acompaño, la creación de los sustantivos y sobre todo de los nombres propios. Esta manera de desarrollar el lenguaje llama la atención entre los científicos y muchos de ellos ya han propuesto que perfectamente eso podría no ser otra cosa que un fraude y una sobre interpretación del asunto. Es decir una voluntad de exagerar para poder explicar el surgimiento de las palabras en una forma cerrada y concluyente.

Por otra parte, los patsonianos, se dejan llevar por este principio y se muestran entusiasmados. La posibilidad de que el hombre haya podido crear palabras desde objetos considerados antiguamente sólo como objetos decorativos podría llevar a una gran interpretación sobre el uso de objetos en los monumentos funerarios y también podría rever los conceptos como el origen de la magia y sus implicancias. Johanna Stevenson una de las más radicales seguidoras de Patson llega a decir más: “El Kalinimrod es sin duda, una muestra de cómo la magia y la religión fueron el primer intento cognitivo hacia la abstracción. Por lo tanto esto puede llegar a implicar una revisión de los ritos como construcciones que proponen poner a la intuición como punto de partida para la creación de significados nuevos.” Lo que haría un científico del lenguaje con el análisis de las estructuras ya vigentes en nuestra memoria podría ser entendido como un proceso que tuvo lugar en el análisis y la distinción de objetos creados por el propio hombre. De esta manera no existe otra interrogante de cómo fue la relación con la naturaleza de los hombres de Mz-1 para desarrollar una cosmovisión completamente diferente a la que se han considerado hasta ahora. Pese a que no se supone los motivos de sus extinción se intuye que por una parte el no desarrollo posterior de herramientas y la inflexibilidad del sistemas que paradójicamente amaba el cambio fueron una de las claves de la desaparición.

Pero esta cultura sigue siendo el misterio más reciente de la arqueología. Ya que el kalinimrod queda atado a un proceso donde debemos intuir una suerte de puente entre el mundo de las sensaciones y el de las ideas. Este momento en el que hombre puede empezar a desarrollar abstracciones que escapan a su realidad corriente es una parte fundamental. También lo es la paradoja sorprendente que estas personas tuvieran un miedo atroz a volver al pasado, es decir al mundo ausente de palabras o mejor dicho de proto-palabras es decir de Kalinimrods. El drama de esta etnia fue la conservación en un plano tal vez mágico donde sus nombres o la constitución de sus representaciones valió un proceso que les llevaba varios años y que cambiaba según sus relaciones, como de la supervivencia de las poblaciones. El ánfora más detallada llega a contener la concatenación de tres Kalinimrods y Patson quiere ver en ella, a la familia y a la primer proto-oración en el mismo plano. La unión posible luego de la gran explosión de palabras, unía objetos con la relación de los sujetos de acuerdo a los signos de parentesco. Esta manera de dar principio a la sociedad dice que la teoría del Kalinimrod esta sujeta a gran controversia. El mecanismo casi azarosa de búsqueda de comparaciones e identidades, fue el intento de un pueblo originario de la especie humana por encontrar un orden a un mundo que tal vez vieron caótico pero digno de ser conservado, hasta que según ellos; siguiendo a Patson, “El cielo se los llevase”. Otro de los datos que desarrollo Patson, fue la idea de que este pueblo fue incapaz de ver la idea de grandes masas de aguas, como tampoco entendieron que esta fuese una sustancia ausente de todo nombre, por lo que era transparente.

Por ahora, no mucho más se ha llegado a dilucidar al respecto del Kalinimrod. Si podemos decir hallar una variedad rica de interpretaciones y una tercera vía para entender el surgimiento de los humanos. La pasión por el cambio puede que sea este gran misterio que nos propone Patson pero que parece tan remoto que remontarse hasta allí parece imposible e inútil.

2.5.10

-El libro de los vivos- (Kill Morena Kill)

Gente en un espacio. Indefinido como siempre. Gente odiosa en el espacio. Quizá por definir. No tener tiempo para arrepentirse, la vida se escapaba. Un hombre tenía mucho que explicar. Aunque no se lo debía a la gente ni a su forma de contar; que era la misma en la que vivía.

El movimiento de la ciudad. Sus ecos. Su distancia; todo es ajeno a esta historia bizarra que nunca escarmienta. No hay nombre común. Si ponemos un nombre simplificamos lo que necesitamos aquí es mostrar la adicción a esa identidad dividida entre uno o más hombres. Sano e insano al mismo tiempo. Corazones rotos en el mundo pop, prefiero la grasa de la comida chatarra. Las baladas heavy metal tenían su sin razón. Si era Buenos Aires no podría ser Bangkok. Aunque este hombre nunca haya ido ni siquiera, fantaseaba con el bullicio. Con las miles de abigarradas personas que como en su ciudad lo verían como algo extraño. Sin embargo la cara de asco con la que solía vivir recordaba que pese a todo podría hallarse más allá del bien y del mal. No tenía sentido ver como los hombres peleaban peleas que no les correspondían.

Lo importante es que vio que no muy lejos de allí, lo que es su alrededor estaba poblado de infelices. Aunque sin romanticismo, no eran infelices que sufrían, no eran cancerosos. No ganaron guerras para nadie. Simplemente eran todos sus conocidos disconformes que vivían el pan de cada día, siempre tenían la expresión de angustiado o indigestados. La mirada al fin de esos conocidos no era más que eso. No había nada negro. Era más fácil inventar una historia que vivirla. De allí el vampirismo que el había heredado por la televisión.

No obstante como podría ser que el éxito tampoco fuer la meta. La decadencia era de lo más risueña. Lejos del romanticismo, siempre solía recordad. La justa medida era reír de la desgracia ajena. No se trataba de un caso pesimista sin embargo tendría una especie de embarazos de desgracias en su mente. El amor y el odio. Degeneraciones del instinto, así pasa el tiempo. Así pasa la vida. Lo gris es el producto del apasionamiento por la idiotez, no se destaca mucho más. Como puede ser un anónimo actor de una historia.

Ya que por más que haya nombre, todo en él es robado. El tiene ese aspecto, robo una novia ajena para sentirse mejor. Golpeó un hombre a traición hasta que lo mata porque necesitaba relax. No se podía esperar el cadalso para un hombre como él. Siempre fue inocente. Si una vez se le pregunto por la maldad dijo que era irracional, y cuando se le pregunto por la bondad dijo que era aún más irracional. Eran los niños de siempre los periodistas, o la gente que decía que sabía de él la que hacía estas preguntas que solían aburrirle.

Si tenía que saber. Era un acto secundario. El digería las imágenes y las publicidades. No necesitaba nada más. No eran necesarias ni las calles, ni las verdades. Solo se tenía que esperar a que los otros se auto señalizarán. Ilusos, ni mejores ni peores. Ni más sociales. Porque al fin, eran desconfiados como él. Esos lo que rodeaban. Tildar. Resaltar. Era vocación de esta gente. No tener otras ideas que aquellas que les imponían. No tenían ardor de nada más. Hojas de marihuana para el té. Nada con que innovar. Alguien dijo que el arte era una mentira, era una mentira que gustaba repetirse. Por eso los que no sabían; tenían tanta fe. Las putas memorias. No se trataba de las políticas, si al hombre medio poco le importa cuan lejos puede ir el mundo que lo engendro aparentemente de manera innecesaria. Ser feliz, no pensar. No se hagan amigos de esos que dicen ser ricos. Chetos, maricones. Narices pequeñas, delicados cartílagos. “No viste el dibujo de tu cara disfruto de mis aficiones”. Insensibles a su propia cara, veían los vicios como algo perdurable.

Este hombre trabajaba en el hospital. Todo su odio a la medicina era obvio. Todo su odio a la ciencia era obvio. Se cagaba en la invención del celular. Dependencia de esos recuerdos que hacían como revistas de chimentos de otras vidas. Un miserable, ahogaba en papas fritas que lo atragantaban su saciedad para destruirse. Objetaban que el tuviera lengua y un reflujo del sabor a basura lo endulzaba como un licor. No por ello no tenía recreaciones. La mentira que se contaba empezaba en una casa. Medio extraña. El sabía que la mujer que había esperado para vivir lo odiaba y eso lo hacía sentir mejor. Ya que antes no lo conocía. Por lo menos se iba a la tumba con una anécdota graciosa para apostrofes, raíces y gusanos. “Para llorar las madres”-decía. No era cuestión de morir sino de amar la vida. No veía que eso pasase. Un día si inspiro y durmió en la puerta de un Shopping hasta que lo sacaron, tiempo después frente a una iglesia sintiendo el mismo frío e indiferencia con el universo para con él.

Este hombre tenía una afición por toda clase de mujeres castradas mentalmente que podrían sufrir más con la telenovela que con su propia vida. Hacía tiempo que había dejado los juguetes rotos. Más si la infancia era un eterno destruir. No tenía el algo de razón. Coger, poco desastrosos, mucho envidiable. Mejor el café. Una amante exigente que le reclamaba parte de su vida. Sino el humo, el valioso que iluminaba los ojos permitía ver las postales antiguas. Permitía fingir que habría llegado importar estar ahí. Un día este hijo de vecino. Un pobre no punk, un negado a los rastafaris. Pero no a la marihuana vería el mundo menos solitario. Ya que recoger de la basura el mañana era una tarea que le exigía poco esfuerzo. Cuando estúpido. Tener el dinero, tomarlo de la distracción de algún que otro. Los que se lo olvidan se lo olvidan. Los temen medican.

Habíamos dejado los fantasmas de Bagdad en el televisor. La gente temía perder el dinero. La gente temía perder su vida. Mientras tanto bajaban más frituras. El dinero también faltaba. Así que en el hospital se puso a buscar cosas para vender y robó algunas. No muchas. Después de todo quedaba afuera la superstición de que atraparían al culpable. No mil veces no. la última de las acciones caritativas, fue la de liberar de un adicto al humo de su sufrimiento final llevándole a casi el pie de la muerte ese paquete de cigarrillos final que lo calvará en ese lugar. Al cabo de un tiempo estas conductas le valieron el odio de algún que otro empelado y lo expulsaron de las paredes blancas azulejadas.

“Yo tenía en mente esto”-decía. Con ello vio que se tiró dos días a mirar televisión. Tenia que quedar algo por hacer compro muchos diarios y empapelo las paredes que lo rodeaban. Algunos pensaban que era un chiquero, cuando lo vieron hasta una mujer le expresó que no merecía esto. “Ya era tarde”- recalcó, el hombre misterioso. Así la gente no sabía que hacer con él. A veces era alegre a veces la muerte. Una expresión babosa que negaba todo pensar. Al fin un día la comezón lo expulso hasta una plaza. Busco entre los objetos vendibles. Solo quedaban unas cosas gastadas como portavasos y otras inutilidades. Al fin las vendió. Con ello compro aguas, aspirinas y un pancho. Al tiempo empezó a trabajar en un estacionamiento. Desierto de hecho. No obstante había paga.

Si eso no merecía la atención, una silla. Una mirada que explicaba el desconcierto se dice que aprendió a distinguir las manchas de todo ese lugar. A menudo las dibujaba. Madonna, y sus cortesanas, obras de mujeres estilizadas. Eso era para ineptos. Como no ver lo valioso de un garaje piojoso como este. Nadie entendía. Solo el podría llegar a mostrar al mundo las joyas que la miseria dejaba en la dejadez. Sin embardo había que tener un mate cerca. O unos cigarrillos. Uno de los hombres que estacionaba siempre le recordaba que lavar la ropa era un buen hábito. A lo que el le respondía con gestos obscenos de todas las clases. Porque no se trata de vivir simplemente. “Yo no soy de esos”-explicaba. Cuando explicaba esto. La gente lo tomaba por taimado y eso le era ideal. Su lado de las cosas. Luces blancas, igual que campanas. Una reja. Y otra reja más. Un paquete de galletitas Lincoln, eso podría ser una historia feliz. Hasta que se acabe. No podría esperar mucho. Cuando el calor era mas fuerte solo metía la silla más adentro en el garaje y escapaba del sol. Un cassette que patinaba repetía verdades que a Cobain lo llevaron al suicidio. Por que si a él, lo habían llevado; cosa que pensó aquel hombre de la quietud, a nadie más.

“No tenemos noticias de veganos espirituales”- Era una frase que él completaba el cuadro, como estampilla al sobre. No obstante al fin cuando el día acababa. Huía del estacionamiento. Su mirada somnolienta se despejaba y la luz naranja proponía un adelante. No importaba el miedo y los desastres de los diarios a los cuales había que leer para poder olvidar mejor lo que ocurría en la propia vida. Esto solía estar lejos, demasiado lejos de novedades. En fin. Una mujer, Ana. Ella podría decirle que hacer, por lo menos parecía una especie de cerrajera mística. Mierda. Mierda. No se podrían ver cuando él quisiera. Después de todo con que excuso iría. El no era de las clases de personas que inventaban motivos. Por eso cada vez que iba a hacer una nueva copia de la llave de tu casa se deshacía de las anteriores. Así podría ir con la honestidad del ingenuo que es fundamentalmente estúpido. Ya no a reclamar amor, ni sexo. Cosa que con el dinero podría encontrar. Sino afecto casi familiar. Poner fin a la soledad sin objeciones ni convenciones. Comer y ser comido. Eso era más que un simple intento de dejarse atrapar, tenía el señuelo de las ventas inútiles.

No se podrían esperar grandes cosas, esa fue la única enseñanza útil que heredó de su tío. Un hombre que eligió vivir al margen recorriendo plazas por las tardes, casi una especie de fantasmas y un sobrino que cada tanto se ponía fastidioso con preguntas. Todo el mundo en la juventud las haces y frecuentemente- cosa que el tío recalcaba admitiendo que la gente pasado el tiempo quería dejar de saber. Su espontaneidad era inútil era adultos y viciados. No obstante el tío murió feliz. Ya que vivió feliz con poco, siempre sin esperar ni hijos ni fortuna. Una momia en vida. Una momia feliz. Todos los otros que al igual que ahora hacían con su sobrino trataban de compadecerse recibían de parte una mirada de desprecio. Algunos sospechaban que había sido torturado por lo milicos y que había quedado así.

Lejos estaban de la verdad. Una de las causas de la inexpresividad del hombre fue su parálisis en el rostro. Nunca mostró sonrisa aunque quisiera. Tampoco podría llorar, solo cuando sentía dolor como por ejemplo cada vez que dejó a su familia partir hacia el otro lado. Pasó por allí volando. Sin más. De eso, su tío quedo una renta generosa. Nadie sabía de donde. Con lo cual se podría vivir, siempre y cuando un día el fuese su sobrino pasará por la tumba. Cosa que no pasó por mucho tiempo. Esta extraña condición era una de las últimas lecciones de su primo para con su sobrino, la sobriedad final hasta con los muertos. “Si vas a matar sé justo”-Así marcaba el epitafio. Quien sabe lo que habría querido decir. Pese a estos casos tan extraños el hombre sin rostro que por Buenos Aires buscaba que la memoria se destrozaba equivocadamente se cruzaba con su pasado que lo veía indiferente. El fijaba la mirad y se hallaba igual. Eso era un mundo de lo más extraño para los de afuera, todos aquellos. Esos que no tendían el vivir como estar. Sino como ser. Ellos buscaban algo dentro sí que nunca iban a hallar. Hallar era de por si una consigna de lo más absurda el era un ser apolítico No tenía que buscar la historia máxima. La historia sin héroe y sin venganza esa era su revolución, en el tiempo en el que hombre era el hombre. Un hombre que tenía que ser preguntado, un hombre que tenía que imaginar que en la naturaleza allá afuera podía haber algo más.

“No me gusta ver, no me gusta”- Esa era una de sus grandes mentiras. El miraba y buscaba ver ese nuevo reino. El reino de los miserables que se creen alguien. Ese reino de los que no lloran porque no saben que es llorar. Ganadores de algo. Ganadores de la maquina. Ganadores azarosos. Unas personas que intuían que podrían sobrar, aunque no nunca se lo preguntarían seriamente. Estas personas eran las curiosidades de este hombre ajeno a todos los demás. Mujeres que morían por su imagen, y sin embargo seguían siendo feas. Una fatalidad risueña, cruel. Si se las miraba a los ojos ellas se sentían molestas como criticadas. Sus fallas eran comprensibles pero no la mirada ajena. Aún peor la mirada que calla esa es la mirada peor y más maligna. Pero aquí no queda espacio para la maldad. Se trata de un despertar del quinto sentido. Un sentido que no quería ser uno más, era una especie de responsabilidad para con el universo. El no podía dejar pasar a esos que estaban condenados a ser olvidados por inútiles. Tendría que hacer de ellos su motivo de reflexión como las manchas del garaje. Como no eran suficientes miraba que el drama de la gente simplemente estaba arreglado. Nunca se sufría demás. Nadie pudo con tamaña tarea. Porque con ella se implicaba esa mortalidad reducida y no dramática, no se lograba nada con ello más que aburrir. Simplemente se tenía que dejar pasar. Toda la fanfarria valía más. Quien podrá dudarlo. No es sin embargo un pesar, sino un hecho que lo hacía ver a la gente como un conjunto de temerosos. Él no estaba por encima de ellos pero sí en la distancia. La sanidad le contraindicaba esto. Pero el ojo desnudo el que al fin captaba nuevamente a la gente que iba de A a B. Sin siquiera saberlo estaba siendo objetivo con la humanidad, un espejo que no se empaña ni se raja.

Con ello, este hombre de la niebla pero quizás común y corriente avanza en Buenos Aires. No es sin embargo alguien más. Si lo fuera se habría rendido. Nuevamente pasa el tiempo. Mucha televisión. Asqueado de la publicidad decide al fin, considerar al contenido de cualquier cosa fuera de ella como un lujo propio de un díos. Viendo en cosas como una papa en un supermercado un valor agregado. Esa cosa divina que casi se haya descontaminada. Con esto se pudo decir al fin. Que bien, no es que elijo que me narren sino narrar. Todo esto es mío. No aquello arbolado, los vampiros y los adolescentes, o la domestica que enamorándose del patrón se hace millonaria. Esto es distinto. Tiene su gusto en poseer como realidad algo más que anécdota. Fue todo aquello que se tiene a ignorar por ser menos brillante. Con ello se pedía que los sueños se hicieran del barro como dios hizo al hombre. Si era sencillo después de todo objetar que el hombre es muy propio de esta tierra. Más los símbolos invadían, imágenes que venían colores y siluetas. Muchas más que las que se imagina uno.

Con ello he reducido todo lo violento. Lo extraño en este hombre. Quizá no puedo ver sus ojos. Quizás no puedo contener la idea de su existencia. Tendrá él una mentira. Pensar en gente como él gente con tiempo que le sobra y no muere de hambre. No corre, no suda. Vive. Al fin y al cabo a eso aspira. Su sueño es más profundo que el de la mayoría. Goza de una salud igual de buena. Sin embargo alguna gente lo mira con pánico. Tiene a fuerza de algo ser. Un ser podría ser terrible queriendo ser un ángel como lucifer. Con ello quiero decir que un hombre podría tener apetitos muy distintos a los que aparenta. Tendríamos que dar el salto hacia una intromisión demasiado obscena para al fin dar en el blanco. Este hombre sin piedad. Es acaso el peor de los hombres que se ha visto. No creo que en el haya algo que se pueda llamar sentido común. Este hombre podría matar incluso y no le pesaría cargo alguno sobre la conciencia. Sin embargo como saberlo, yo tengo que dar lugar y cabida a las cosas más propias.

Si soy obvio me colgarán de mis orejas. Yo oigo los pasos que abandonan la fachada. Siento que la gente que no se preocupa en nada por esta clase de personas por eso lo elegí a él. Un misterioso. Un ser que nada resalta y sin embargo sigue viendo. Espera el momento en el cual desfonde y despliegue su poder. Muchos antes que el juraron prometer, es hora de que las promesas sean tan pocas que cuando gente como este hombre las haga tengan peso y no risa. Con esto se despedía por el primer tiempo, el primero de las muchas estaciones, y descansos que se tomaría. Porque el sino encuentra la llave, busca la ventana. Así como en su casa entra, acude a todos los lugares si por casualidad se interesasen. Si esta fuese la historia de un gran hombre quizás tendría como origen un pesebre, o un poblado. ¿Quién sabe del rey David? yo hablo del año tres mil. Sin dinastía un hombre solo hereda una corona de azares y dudas que presentan en su cabeza como la flor de todas las maldades que podrían intentar contra él.

Yo creo que si ustedes vieran que no he dejado de hablar de uno solo aparte. Si solo no hubiese dado al afecto ese papel de narcótico que suele tener. Un hombre no espera ser más que eso. Luego por medio de una metamorfosis sueña, más al fin cuando despierta. Termina igual de indiferente que el hombre que describo. Un sobrio pese a la droga. “Simplemente el tiempo pasa, la vida pasa”- cosa que le dijo a Ana; cuando esta preguntaba por la constantes perdidas de sus llaves. ¿Violencia? es querer. Un hombre que quiere solo una cosa tuerce el mundo en torno a esta. Porque matar a una persona si acaso se la puede hacer sufrir mil veces. El hombre de la tranquilidad sabía de esto. Entonces comprendió que el perdón también podría ser condena. Estaba condenado a perdonar y con ello dejar que el mundo siguiera su curso. Con él dentro, pero sin su aprobación.

Disfruten ustedes, los hombres que no temen por su riqueza sean gente. No sean el poder que no corrompe solo transforma haciendo interferencia. Haciendo que tengamos que ser mucho más. Todo ese vaciamiento gratuito se ha consagrado a una gloria que le fue ajena siempre. Mirarse en un espejo preguntándose por las cejas y no por el ser. En raras ocasiones es un descanso y no una desgracia. Sepan ustedes que cuando supe que este hombre existía, lo repare de la atención de los muchos. Por eso una foto de él era imposible tan solo un relato. Una especie de atajo, pero si se quiere encontrar este hombre y esta vida se debe saltar. Tanto que una vez del otro lado, yo y ustedes junto con él miraremos lo festivo de las ciudades in reír. Este vals dice; se sufre al pedo. Este vals canta mejor no pensar que no hay que morir. Este compositor, tuvo en su mente lo mismo que yo cuando escribo hacer de lo mínimo una especie de película a la que todo se le incorpore. Podría ser en todo caso que nosotros, hombres malos. Hombres buenos, tengamos que dejar las armas. Tendremos que dejar que el azar nos consagre. La fortuna enredó sus cabellos en todos estos. De los que hablo son los que no reciben el beso del encanto del sueño. Son esos que llevan el polvo por encima de la ropa. Agorafobia espiritual. Se dijo que un hombre que no teme no tiene límite, ¿esto sirve para algo?, como toda idealización no llega muy lejos. Como no llega lejos el hombre que piensa que alcanza pero no disfruta y si se te ha quitado todo, la risa se te ha regalado. Vean al fin como la miseria es una mesa, como la distancia es una bendición. Aquellos que me puedan enviar postales de las cosas que hablo sean corteses. Hombres de soledades con triunfos, ¿han ido lejos? ¿Saben como volver?